"Un neoyorquino en Lyon. Eso es lo que hace feliz a Andolini, tanto vaciarse como inmortalizar el momento. Andolini nunca había visto el interesante perfil de Zach. Tras algunos mensajes privados, Zach, de paso por París, reserva un hotel y un tren a Lyon. Los dos hombres se conocen en el balcón que da al Parc de la Tête d'Or y luego un poco más a fondo en la intimidad de la habitación del hotel. Una vez juntos, ambos quedan impresionados y abrumados por el otro. Zach estaba impaciente por tocar, sentir y chupar la pesada polla de Andolini. Andolini estaba ansioso por penetrar el culo firme y musculoso de Zach. Como siempre con Andolini, nada estaba planeado de antemano. A Andolini le gusta descubrir los deseos ocultos de sus parejas para excitarlas. Todos los detalles ... aquí" (TK)